El "juego" de la ouija consiste en poner las
manos sobre una pequeña plataforma que se desplaza lentamente sobre un tablero, movida por alguna fuerza misteriosa. El
tablero está inscrito con números y las letra s del alfabeto. Los jugadores esperan obtener respuesta a sus preguntas
uniendo las letras sobre las que se mueva la plataforma. La "diversión" está en la curiosidad y el misterio
de comunicarse con algún espír itu que revela secretos y, cuanto más parezca "funcionar", más la ouija (y el espíritu detrás
de ella) atrae y ata, hasta convertirse en una obsesión.
Un artículo (no conocemos su autor pero representa la posición
de los medios seculares) dice:
Mucha gente se ve atraída por la posibilidad de contactar
con un ser querido ya muerto, otros sólo por curiosidad y otros para pasar el rato... La verdad es que con el tiempo
la ouija está variando el destino del contactante en función de las nuevas creencias. Por ejemplo hay quien la utiliza supuestamente
para contactar con seres extraterrestres, seres de otras dimensiones, ángeles, ... En definitiva, parece que el juego del
tablero hoy en día nos ofrece nu meros as posibilidades.
Orígenes
Ya Pitágoras (540 a.C.) usaba un artefacto parecido cuando
se reunía en "círculos" en los que "una tabla mística que se movía con ruedas" hacia signos que el filósofo y uno de sus estudiantes
interpretaban a la audi encia como revelaciones del mundo invisible. En la China, antes del nacimiento de Confusio,
se usaba algo similar, lo que parecía ser una forma "no peligrosa" de comunicarse con los espíritus de los muertos.
El mundo del ocultismo abrazó con entusiasmo a la ouija. En 1853, en Francia, el "espiritualista" M. Planchette, diseñó una ouija similar a la que hoy día es popular.
Elija J. Nond, en USA, le hizo variaciones; William Fuld le compró los derechos y un año después la patentizó. Finalmente,
en 1966, "Parker Brothers" comp ró los derechos sobre el juego de la ouija y ha sido desde entonces su fabricante. Sin
embargo la ouija, en diferentes versiones, se ha popularizado tanto que se puede obtener por infinidad de medios.
"Parker Brothers" y otros, para aumentar el mercado, han
querido enterrar la relación de la ouija con el ocultismo. A estos señores lo que les interesa es popularizar el juego para
hacer dinero. Prefieren decir que los jugadores buscan su "yo" subconsciente para obtener respuestas. Según esta versión,
la ouija trae a nuestra conciencia lo que está oculto en nuestro subconsciente. Como una llave para acceder a nuestro conocimiento
interior.
Pero eso es pura ficción para cubrir una realidad más oscura.
Cuando el hombre se abre a buscar respuestas más allá de lo que se puede llegar por el uso de la razón (estudio, lógica),
entra en el campo de lo sobrena tural en el que sólo hay dos caminos: Dios y el demonio.
El mismo artículo arriba mencionado delata la verdad sobre
este nefasto juego: "En definitiva (la ouija) es una manera más de intentar acercarnos al mundo de lo oculto, en busca de
información de aquello que por el momento no podremos demostrar".
Ahora existe una nueva versión de la ouija para el siglo
XXI: un juego para ordenadores (computadoras). Es más sofisticado que el tablero pero su importe espiritual es el mismo.
Si alguno dudase la conexión entre la ouija
y el ocultismo, solo necesita hacer una búsqueda en el internet para percatarse de la cantidad de grupos que la utilizan para
comunicarse con espíritus. De u no de estos traducimos al español: "La tabla Ouija es quizás uno de los métodos mas controversiales
para comunicarse con espíritus. Sobre todo porque lo puede usar cualquiera y no requiere poderes especiales para navegar.
Quizá s por esto la mayoría de los psíquicos desaconsejan su uso"
¿Cómo puede funcionar la ouija?
La Iglesia aconseja no dar una explicación de orden
sobrenatural a un fenómeno que pueda ser explicado en el orden natural. Primero se deben agotar las posibilidades naturales
antes de pensar en causas preternaturales y aun así no tenemos tener certeza.
Para explicar el movimiento de plancha
o la copa, en principio, se debe tomar en cuenta el movimiento natural pero inconsciente de los músculos de lo
s mismos participantes, el "reflejo miokinético". Las fuerzas del cerebro, las tensiones psíquicas y otros factores
del cuerpo se reflejan en los movimientos musculares que a su vez mueven el objeto.
Pero, aunque concedamos que el movimiento en si mismo
sea un fenómeno natural, ¿Como se explica el "deletreo automático" con mensajes. Muchos dicen que refleja la actividad del
subconsciente. Au nque esto fuera cierto, no por eso se puede descartar la acción del maligno valiéndose de todos los
medios a su alcance. El testimonio de innumerables personas indica que se dan comunicaciones cuyos mensajes tienen una dirección
maléfica que sorprende a los participantes. En muchos casos ofrece información que los participantes desconocían. El lenguaje
y las tácticas que se manifiestan corresponden con frecuencia a lo que Jesús nos advierte que es característico del demonio:
Consejos contrarios a la moral, mensajes que llevan a la desesperación o a la presunción, invitaciones a desobedecer a Dios
a cambio de alguna oferta de bienestar, riquezas... Por sus frutos los conocerán.
Se ha tratado ingenuamente de descartar la injerencia
maligna a raíz de un experimento en el que no se logró un mensaje coherente cuando se vendaron los ojos de los participantes
y se cambió el orden de las letras en el tablero. Argumentan que si fuese el demonio no hubiese tenido dificultad de vencer
esos obstáculos. Estos señores no comprenden la sagacidad del demonio para esconderse cuando le es util.
Las Sagradas Escrituras nos exhortan: "Sed sobrios
y velad. Vuestro adversario, el Diablo, ronda como león rugiente, buscando a quién devorar" -I Pedro 5,8. Esta advertencia
es necesaria porque el demonio realmente existe y realmente tiene acceso a nosotros por diversos medios. Puede utilizar aun
los movimientos naturales y el subconsciente para guiarnos hacia el mal, tentarnos, confundirnos y asediarnos.